viernes, 18 de marzo de 2011

Has de ser

Has de ser mi perdición,
tú, hija del caos,
matriz de la destrucción.
Has de ser mi redención,
tú, todos mis pecados,
cura de mi putrefacción.

Tú, ser parido en el dolor,
en las entrañas de mi miseria,
has de acabar con mi inacción,
ave que pica la materia
que corroe mi alma etérea
y deshilacha mi razón.

Has de ser mi universo,
mi luna eclipsante,
mi desgarrado verso
y mi colérica amante.

Has de ser mi otro yo,
mi alma enferma,
mi conciencia agónica.
Y en cada resurrección
vendrás a mi como la muerte:
Me destruirás y reharás,
me cegarás y parirás.
Y, pues, si tengo suerte,
despertaré del profundo
sueño inerte
en el nuevo mundo
que se crea al verte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario